La Gran Fiesta gaucha que reúne a músicos, jinetes, hombres camperos, artesanos, pilcheros y el público fiel que acompaña al Festival comenzó a despedirse de Diamante. 

Se asomaba de a poco la noche y el arrío del Pabellón Nacional en la entrada del predio daba apertura a un viernes distinto para febrero. “Perfume de carnaval” se lo escuchó cantar alguna vez a Peteco Carabajal bajo este cielo recostado al Paraná, perfume de Festival para cerrar 46 años de tradición y paisanaje.

“En el mes de febrero, se volvió a vivir en Diamante este aire de Festival, con destrezas campera y el folklore en el escenario. Diamante tiene la totalidad de las plazas ocupadas para este fin de semana” expresó el titular de Turismo Municipal, Tec. Diego Ré. “El Festival siempre marcó la agenda turística de la ciudad, por el flujo de visitantes de Entre Ríos, Santa Fe, Buenos Aires y también la provincia de Córdoba; lo cual significa una gran satisfacción poder captar este segmento de público, ya que Córdoba e tierra festivalera” indicó el funcionario.

Payadores y animadores ya levantaban sus voces en el Mangrullo Don Rafael Bueno y los primeros baguales pisaron el Campo Lisardo Gieco. Los Bastos no se hicieron esperar y 33 fueron las montas para esa categoría, en tanto que las clinas cerraron la segunda etapa en 35.

Abrió el escenario Carlos Santa María

El escenario presentó su gala y los jóvenes de FusiónArte dieron inicio a la artística programada. “Estamos muy contentos y agradecidos de volver a estar en el Festival, era una cuenta pendiente volver a mostrar nuestro arte” destacó Antonella Ré, en representación de quienes integran el grupo. 

Y el chamamé se hizo sentir de la mano de Don Hipólito Sosa y su Conjunto en el escenario Carlos Santa María, donde su gente lo espera como siempre, expectante para verlo, escucharlo y recibir a uno de los tantos diamantinos que en las noches festivaleras han brindado la música litoraleña.

“Contra Tata Dios no se puede hacer nada, pero hoy podemos vivir las noches, que no se pudieron en enero” destacó Sosa al abrir su espectáculo.

La noche acompañó, el público aplaudió al cantor que demostró que la música es su pasión.

“Hoy nos juntamos a disfrutar de nuestra buena música del litoral, la que nos representa” destacó Don Hipólito.

Llegó el turno de Tolato Trzuskot Trío en el escenario Mayor de Entre Ríos, un grupo familiar de los pagos de Federal. El Grupo se formó hace dos años y en su haber cuentan con un solo disco editado y muchas ganas de seguir con la música. “Somos tres Tolato, esto queda en familia” afirmaron durante el espectáculo, donde brindaron a los presentes buena música y energía, a lo cual el público respondió constantemente.

En su repertorio, las melodías de pura entrerriana se dejaron escuchar y destacaron que: “Estamos muy contentos de estar nuevamente acá, anteriormente vinimos formando parte de Nostalgia Guaraní, pero ahora podemos volver como grupo y familia musiquera”.

“Dicen que hay un musiquero al trote lento con su violín, en la inmensidad del monte se escucha un violín sachero, sonidos que trae el viento lleno de magia y misterio” se presentó Leandro Lovato en el cielo abierto de Diamante.

Con ocho discos editados, “El Lele” fusiona en su repertorio la esencia del monte santiagueño con la melancolía rioplatense. “Vengo de una tradición más asociada al monte que al Litoral”, esbozó alguna vez.

Al cerrar la primera parte del escenario, el cantautor de Granadero Balgorria agradeció a Diamante por la calidez y disposición para su show, “Un placer ser parte de esta Fiesta tan linda, estar en este lugar tan sagrado para los diamantinos. Teníamos muchas ganas de venir” resaltó el santafesino.

El espectáculo de Lovato no solo fue talento musical, sino que brindó un show de baile de la mano de una pareja, la cual incentivó a bailarines que estaban en la platea y desplazaron la danza en el escenario, a través de chacareas simples y escondidos, además de interectuar con el público muy bien.

El carisma del músico hizo que pudiera mezclarse en el medio de la platea y tocar una zamba, llamando la atención del público con el despliegue de su violín.

Madrugada chamamecera para recibir a Los Tatas del Chamamé, quienes presentaron su nuevo disco “Bien prendido y rebenqueando”. A puro sapucay, los representantes diamantinos del chamamé, cerraron la noche del viernes ofreciendo al público presente no solo sus nuevos temas sino también los clásicos que los representan.